Alertas
La alerta es un estado o condición excepcional declarado por la
CNE, con la intención de desarrollar acciones operativas tendientes a garantizar
la efectividad en la respuesta debido a la probable manifestación u ocurrencia
de un evento, que cause una situación de emergencia o bien que exista la
probabilidad que la ocasione.
En Costa Rica los tres estados de alerta
se conceptualizan de la siguiente forma:


Indica cuando se prevé que un fenómeno podría afectar o
poner en peligro una comunidad, región o país.
Acciones
A. Los
Comités de Emergencia deben mantenerse activos y estar monitoreando los
sectores de mayor riesgo en los cantones.
B. A
la población en general monitorear las condiciones en las áreas de su
territorio y estar pendientes ante cualquier situación que se pueda presentar.
C. Precaución
en las carreteras para los conductores.
D. Favor
acatar las indicaciones que emitan los entes oficiales por medio de redes
sociales, medios de comunicación u otros.

Indica que el peligro crece y se sabe que en el fenómeno va
a afectar a la población.
Acciones
A. Activar
procedimientos preestablecidos de los organismos de socorro.
B. Tomar
precauciones específicas según los planes de emergencia existentes en sus
hogares, lugares de trabajo o comercios.
C. Estar
atentos a la información que brinda las instituciones OFICIALES lideradas por
la Comisión Nacional de Emergencias (CNE).
D. Establecer
y reforzar redes de vigilancia, monitoreo e investigación.
E. A
los organismos de socorro preparar recursos de búsqueda, rescate y asistencia.

Se determina alerta naranja cuando se presentan condiciones
de riesgo alto. Cuando se prevé que el evento adverso ocurra y su desarrollo
pueda afectar a la población, medios de vida, sistemas productivos,
accesibilidad a servicios básicos y otros.
Acciones
A.
Aplicar con rigurosidad las siguientes medidas de
prevención: Lavado de manos, protocolo de estornudo y tos, no tocarse la cara
si no se han lavado las manos, no saludarse con contacto físico y evitar
asistir a eventos y actividades de concentración masiva cuando se tenga
síntomas respiratorios, en especial si se tienen factores de riesgo a la salud.
B.
Proteger a nuestra población más vulnerable como
son aquellos diabéticos, cardiópatas, hipertensos, personas mayores o con
padecimientos pulmonares, así como aquellos pacientes con cáncer o con
enfermedades que comprometen su sistema inmune, quienes enfrentan con mayor
severidad el virus.

Se establece cuando una amenaza
crece en extensión y severidad, requiriendo movilización de todos los recursos
necesarios para la atención de las emergencias.
Acciones
A. Activar
las alarmas preestablecidas.
B. Evacuar
y asegurar a la población afectada.
C. Ejecutar
los planes de emergencia.
D. Dar
seguimiento continuo a la información que brinda las instituciones oficiales,
lideradas por la Comisión Nacional de Emergencias (CNE).
E.
Los comités de emergencia y las instituciones
deben continuar con los mecanismos y acciones de respuesta y disponer de los
recursos necesarios para la atención oportuna.